Viajes del Imserso: 880.000 plazas para 4,2 millones de usuarios no bastan
Hosteltur. Las principales patronales de agencias y hoteleras ya están buscando soluciones.
Los viajes del Imserso han puesto en circulación 880.000 plazas en su temporada 2023-2024, 70.000 más que en la anterior, y se han enviado cartas a un total de 4.219.000 beneficiarios de este programa de turismo senior. Incluso teniendo en cuenta que no todos deseen viajar, la capacidad no alcanza ni siquiera para la cuarta parte del potencial. De repetir mejor ni hablar, y por supuesto, las plazas ofertadas nunca son suficientes para la demanda hacia los destinos de costa e islas.
Ante esta situación de desajuste, ampliamente constatada por usuarios, agencias de viajes, hoteleros y cualquiera que de una u otra forma tome parte activa en esta modalidad de viajes de turismo social, es evidente que el Imserso genera un volumen de insatisfacción que cada vez compite más con la satisfacción que pueda facilitar a los viajeros. La inversión de la pirámide poblacional que vive España es quizá lo que menos ayuda.
El motivo es que, debido al envejecimiento de la población, cada vez son más los usuarios y, por contra, no es infinita la capacidad de ampliar plazas del órgano del Ministerio de Derechos sociales, Consumo y Agenda 2030. Los problemas de adjudicación y gestión también son evidentes. Pues es un pastel importante y cada vez son más los aspirantes a la licitación que se lo disputan.
En ese escenario, los turoperadores se posicionan en ese segmento turístico, porque la demanda se amplía ante la ingente cantidad de jubilados y pensionistas que surgen cada año, con un perfil viajero diferenciado de la generaciones anteriores. Se caracterizan por una exigencia mayor y por ser más aventurados en los destinos que escogen para viajar. Si son internacionales, deben dirigirse al sector privado.
Un problema a resolver de cara al futuro
La problemática del Imserso “estamos intentando que se resuelva de cara a futuras temporadas”, señalaba el pasado lunes el presidente de la Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas (ACAVE), Jordi Martí, en un encuentro con los medios de comunicación, consciente de que se necesita un cambio en profundidad. Evolución que a su vez han pedido el resto de patronales sectoriales: CEAV, UNAV, HOSBEC..
Los viajes de Imserso, que originalmente surgieron para cubrir una necesidad social y, al mismo tiempo, proporcionar una alternativa al sector turístico que permitiese evitar la clausura de una parte de la planta hotelera cada año tras el fin de la temporada alta, han visto como cada vez más establecimientos se iban dando de baja porque no veían factible continuar con unas condiciones económicas bajas o congeladas.
Las alternativas privadas a los viajes del Imserso
En este contexto, a los principales grupos turísticos -Ávoris, W2M y VECI-, así como a la UTE Mundiplan (Iberia, Alsa e IAG7), creada en 2015 para licitar cada año lotes de los viajes del Imserso (pero que esta vez se ha quedado por primera vez fuera), les interesa cada vez más el segmento del turismo senior, y en consecuencia están lanzando sus propias alternativas.
Las iniciativas que llegan desde el sector privado ya están cuidando aspectos como la remuneración que perciben los proveedores -principalmente hoteles, agencias de viaje y transportistas-, los aspectos en que difiere la demanda de los turistas senior actuales; y ofrecen nuevos destinos o la posibilidad de elegir entre media pensión y todo incluido. Una gama de posibilidades que el programa público también debe considerar y, quizá, incorporar.