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La Vanguardia. El sector confía en que a partir de la Semana Santa del 2022 se inicie una recuperación con una intensidad similar a la que se registró durante el verano y el otoño del 2021.

Los empresarios agrupados en la Mesa del Turismo de España solicitaron este jueves al Gobierno que se aplique un IVA reducido durante un plazo de tiempo acotado para impulsar la recuperación del turismo de congresos, reuniones, incentivos, convenciones y exhibiciones, conocido en el sector como Turismo Mice.

El sector confía en que a partir de la Semana Santa del 2022 se inicie una recuperación con una intensidad similar a la que se registró durante el verano y el otoño del 2021, pero que se vio frenada por la ola de ómicron. “Si no ocurre nada grave, a partir de abril-mayo hasta el final de año España podrá recuperarse de esas pérdidas, que en el 2020 fueron del 70% respecto al 2019 y en el 2021 del 50%. Es decir, se prevé pasar de los 31 millones que llegaron este último año a unos 62 millones. No serían los 83 del 2019 pero sí un gran impulso”, reconoció Juan Molas, presidente de La Mesa del Turismo durante la presentación de un estudio sobre la realidad del sector realizado en colaboración con ObservaTur.

Previsiones. Los empresarios confían en duplicar en el 2022 la cifra de turistas internacionales y alcanzar los 62 millones

En el estudio se recoge que el optimismo de los empresarios de cara al 2022 se basa en una buena evolución del turismo vacacional tanto internacional como nacional, pero que no llega con la misma intensidad al de negocios, ferias y congresos.

“Fitur ha sido un impulso. Una demostración de que se pueden realizar eventos de forma segura. Pero hay que hacer más”, solicita Molas.

Esa es la demanda que trasladan al Gobierno, que impulse el destino España como atractivo del turismo de congresos “no con campañas de marketing, sino con una campaña de promoción que traslade medidas concretas que puedan incentivar a una compañía a elegir este país como el destino preferido para su convención”, aseguró.

Los empresarios reconocen que la Marca España como destino turístico ha salido “menos dañada de lo que parecía al principio de la crisis”. Por ello apuntan que es el momento de actuar para dar ese impulso a los subsectores que todavía no se han sumado a la ola de la recuperación. “Junto al turismo de negocios habría que incentivar también el turismo de golf o el náutico y sectores como los vehículos de alquiler para quienes un IVA reducido por un período limitado de tiempo sería un impulso importante”, aseguró Juan Molas.

No es la única reclamación que le hacen al Gobierno. Los empresarios del sector turístico también reclaman que se amplíen los ERTE. Aseguran que todavía hay alrededor de 105.000 empleados bajo esta figura y subsectores muy afectados “El 30% de los autocares todavía no han salido de los garajes desde marzo del 2020”, explican.

La última prórroga de los ERTE finaliza el próximo 28 de febrero y el sector reclama su ampliación, al menos, hasta el mes de junio, cuando comience la temporada de verano. Los integrantes de la Mesa del Turismo creen igualmente que los fondos europeos Next Generation pueden ser una gran oportunidad para el sector, aunque solicitan la participación activa de los distintos ámbitos turísticos para definirlos con certeza.

Molas manifestó su temor de que no ocurra con los fondos europeos lo mismo que con el de apoyo a la solvencia de empresas estratégicas gestionado por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi).

De los 10.000 millones de euros de dotación del fondo para empresas que lo soliciten y cumplan con las condiciones que se exigen, ha adjudicado solo 5.500 millones. “No hay ninguna explicación del por qué no se han adjudicado los 4.500 millones de euros restantes”, lamenta Molas.