La hostelería pide eliminar la aplicación de los niveles de alerta
Hosteltur. El sector de hostelería sufre las consecuencias de la incertidumbre constante y, aunque empieza a recuperarse del impacto de la pandemia y encara la recta final del año con optimismo por la desaparición de restricciones, también vive con inseguridad por el mantenimiento de los niveles de alerta y los pagos a los que tienen que hacer frente unas empresas “debilitadas”.
El presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería de Andalucía, Javier Frutos, ha manifestado a Efe que mantener la clasificación por niveles de alerta sanitaria genera “inseguridad” al sector, ya que si se pasa del nivel cero al uno se “desestructura todo”, lo que complica a las empresas la planificación.
Por ello, defiende la necesidad de “dar el salto para quitar las restricciones”, ya que la vacunación “funciona y se está demostrando” al bajar la incidencia de coronavirus.
En las últimas semanas han detectado “movimiento” de personas y empresas que se interesan por reservar para el mes próximo o la Navidad, pero “no sabemos -ha subrayado- si vamos a poder dar ese servicio”, ya que el condicionante se mantiene y, al final, de éste dependerán los aforos permitidos, ha explicado.
“Hay ganas por las dos partes pero no queremos que al final se le dé un mal servicio al cliente o decirle que no se puede”, ha señalado.
En cuanto a la actividad de las empresas en Andalucía, ha diferenciado entre el litoral y el interior, ya que en el primero la campaña de verano “ha ayudado a ir recuperando” el negocio, y en el segundo se “ha alargado mucho más la situación” que atraviesan por la pandemia, si bien el último puente festivo -del Pilar- les ha “dejado respirar un poco”.
Esta preocupación se acrecienta porque “ahora se está hablando de que van a subir prácticamente todo”, ha referido Frutos, quien ha indicado que las empresas están “debilitadas” para poder afrontar un aumento de gastos o impuestos, algo que “después de año y pico de pérdidas se hace complicado”.
Aunque es optimista sobre la reactivación de la actividad, ha precisado que las empresas “van a necesitar unos cuantos años” para poder recuperarse del impacto de la covid-19.
En los próximos meses se va a poder “medir el fin de la pandemia” con acontecimientos que van a reunir un gran volumen de personas como por ejemplo la Procesión Magna en Málaga capital el próximo 30 de octubre, y después la Navidad, y se va a poder ver “cómo se desarrolla todo”, según Frutos.