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A pesar de la protección de los ERTE, el sector de las agencias de viajes emplea en este momento a 9.585 trabajadores menos que antes de la pandemia. De los 47.161 trabajadores inscritos en el Régimen General de la Seguridad Social en diciembre de 2019 se ha pasado hasta los 37.576 de diciembre de 2021, es decir, un 20,3% menos, según las estadísticas difundidas por Turespaña.

Si se incluye a los trabajadores autónomos, el número de afiliados a la Seguridad Social cayó un 15,2% respecto a las cifras de previas a la pandemia. En diciembre de 2019, la actividad de las agencias empleaba en total a 64.276 trabajadores entre asalariados y autónomos, mientras en diciembre de 2021 fue de 54.497 afiliados, es decir, hay 9.780 afiliados menos.

La destrucción de empleo en el sector ha sido sobre todo de asalariados, porque en lo que se refiere a los autónomos se mantienen en cifras muy similares a las de hace dos años. Solo se ha recortado un 1%, de los 17.115 que había en diciembre de 2019 se ha caído hasta los 16.921 autónomos de diciembre de 2021, es decir, solo 194 menos.

Y si la destrucción de empleo en las agencias no ha sido mayor se ha debido a la protección que ha dado los ERTE. Hay que recordar que más de un 30% de los 37.576 trabajadores asalariados del sector sigue acogido a un ERTE, es decir, 11.358 empleados, según los últimos datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

Servicios hoteleros

En lo que se refiere a los trabajadores de los servicios de alojamiento, los datos de Turespaña muestran que el impacto en el empleo ha sido también relevante, pero no tan contundente como en el de las agencias.

De los 267.938 trabajadores asalariados y autónomos que había en diciembre de 2019 ha pasado hasta 248.896, es decir, 19.042 trabajadores menos, un recorte del 7,1%.

La destrucción del empleo en el segmento alojativo ha sido exclusivamente de asalariados, 19.954 menos, porque el número de autónomos ha crecido en estos dos años en 912 hasta los 20.848.

El conjunto del sector del turismo cerró el pasado mes de diciembre con un aumento de 498.331 afiliados a la Seguridad Social, un 11,3 % más que en diciembre de 2020, hasta un total de 2,30 millones de personas, con lo que se mantuvo la tendencia creciente que comenzó en junio, de la que sólo quedan fuera las agencias de viajes.

Sin embargo, si comparamos estas cifras con los datos de diciembre de 2019, esos 2,3 millones de trabajadores supone la pérdida de 95.000 empleos en estos dos años, casi un 4% menos.