Marichal: “Los umbrales de rentabilidad todavía no son los que deberían”
Hosteltur. Cuenta atrás para el XIX Congreso de Hotelero que tendrá lugar en Palma.
Entrevista/ El volumen de turistas en España se ha recuperado tras la pandemia y el balance del 2023 “es muy positivo dentro de toda la incertidumbre”, sin embargo, ” los umbrales de rentabilidad todavía no son los que deberían ser”, asegura a HOSTELTUR Jorge Marichal, presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos. El sector se enfrenta a desafíos de cara al 2024, muchos de los cuales serán abordados en el XIX Congreso de Hoteleros que tendrá lugar del 22 al 24 de noviembre en el Palacio de Congresos de Palma. El evento es organizado por CEHAT y la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (Fehm).
¿Qué expectativas tienen para el XIX Congreso de Hoteleros que se celebra en Palma?
Las expectativas que tenemos son muy positivas y el lugar elegido no puede ser mejor, siendo la cuna del turismo vacacional, con hoteleros que han cruzado muchas fronteras llevando la marca España por todos lados. Las inscripciones van bien y sabemos que a última hora, cuando mucha gente tiene la agenda más clara, aumentará. Que el Congreso de Hoteleros sea en Mallorca es una ocasión fantástica para hablar de los temas que más están de moda.
Turismofobia y viviendas turísticas, un debate controvertido
En el Congreso se hablará de la sostenibilidad de los destinos, de la promoción y la gestión, temas que son clave para terminar con la turismofobia, que pensábamos que se desaparecería con la pandemia
Siempre que me preguntan por la turismofobia, y la culpa de la actividad turística y la actividad hotelera, yo les digo que a nosotros no nos pregunten. En España no se ha multiplicado por dos el número de hoteles, no se ha multiplicado por dos el número de plazas hoteleras, seguimos siendo los mismos que hace prácticamente 20 años, y hace 20 años no había ningún problema, entonces el problema tiene que venir de otro lado. Y ese lado, desde un punto de vista muy personal, es el de las viviendas vacacionales, sobre todo del crecimiento alocado y desmedido que han tenido en nuestra sociedad y a nivel mundial.
Hay comunidades autónomas que están trabajando en leyes para ordenar las viviendas turísticas e incluso España está impulsando la aprobación del nuevo reglamento UE de alquiler vacacional
Yo sabía que eran lentos los políticos, pero no sabía que eran tan lentos, porque después de 10 años se han dado cuenta. En primer lugar, decían que no queríamos más competencia y después han dicho que era un tema colaborativo, para complementar las rentas de los pequeños ahorradores. Ya no saben qué decir, porque todo se ha convertido en un negocio: son sociedades anónimas, son fondos de inversión, son grandes empresas que manejan esto a nivel intencionalidad. Cuando sus votantes son los que se han hartado de este tema, es cuando están dándole vueltas al asunto y ahora quieren regularlo. Más vale tarde que nunca.
En el Foro Europeo de Turismo, Exceltur pidió claramente mayor compromiso por parte de las plataformas para frenar el alquiler vacacional ilegal
Estoy atónito viendo que tenemos que estar mendigando que la Unión Europea pida un pre check-in, o que exija (a las viviendas de uso turístico) que tengan una autorización o hayan solicitado un expediente para poder trabajar en algo tan importante como es la actividad turística. En países como el nuestro, que somos receptores, esto es muy importante, porque la marca España, y todo el sacrificio y el trabajo de muchos años, se puede tirar por tierra, porque cualquier persona puede meterse en un negocio sin tener ni la capacidad, ni legalmente las condiciones para poder hacerlo.
Balance otro año de incertidumbre
¿Cómo ha sido el 2023 para los hoteleros y qué prevé para el último bimestre?
Hemos tenido un año muy positivo dentro de toda esta incertidumbre generalizada en la que estamos viviendo los últimos años. Se ha cerrado un buen verano en todos y cada uno de los destinos turísticos españoles, tanto en sol y playa vacacional, como en las ciudades, que han tenido unos resultados espectaculares debido a la diversificación y a la generación de ocio complementario de calidad. La incertidumbre sigue, por la guerra en Ucrania y por lo que ahora mismo está pasando en la franja de Gaza. Muchas cosas han ido pasando en los últimos años: COVID, Thomas Cook, volcanes, incendios, estamos teniendo guerras. Te levantas cada mañana sin saber qué es lo que viene, pero estamos acostumbrados a ser muy flexibles y muy resilientes.
¿Qué previsiones tienen para el invierno?
En principio, la temporada de invierno viene muy positiva en sitios como las Islas Canarias, las reservas son importantes y antes del tema de Oriente Próximo teníamos unos muy buenos datos. Somos un sector muy volátil, no sabemos qué va a pasar con el petróleo, y no sabemos cuánto van a aguantar las economías europeas. Los datos no son buenos en Alemania, en Inglaterra, pero la demanda sigue pujante, por lo tanto hay que seguir trabajando.
¿La rentabilidad también ha sido buena?
No, estamos hablando solamente de volumen. Después de la pandemia todos tuvimos que hacer un esfuerzo importante, las empresas también. Esas condiciones de estrés, las empresas no las pasan de un día para otro. En algunos destinos tuvimos los hoteles cerrados prácticamente dos años y eso hay que pagarlo. También hay que devolver los ICO y las financiaciones externas. Muchos hoteles aprovecharon ese momento para renovarse y hacer obras para generar valor añadido en las infraestructuras, lo que ha propiciado a que se traslade a la tarifa, pero no de manera suficiente, porque entre esto y la inflación, el incremento de tarifa se ha diluido.
¿Cuál ha sido el gran desafío del 2023?
El gran desafío ha sido el racionalizar el efecto pospandémico e intentar conciliar esa explosión, que suele haber después de un tiempo de una crisis tan complicada, con la situación económica a nivel internacional y sobre todo la situación geopolítica. Estamos viviendo unos meses muy extraños. Con una guerra en medio de Europa estábamos con una situación controlada y de una noche a la otra salta lo de Gaza y todo el mundo está nervioso. Al final, tiene que ver con la toma de decisiones de las personas, de las empresas, y eso hace que tengamos que ser flexibles, que tengamos que adaptarnos a lo que nos viene y a confiar en que España siempre ha sido un destino turístico estable y que los clientes siempre han apreciado eso de nosotros.