Cadenas de restauración: el 80% prevé facturar más en 2023
Hosteltur. El 87% de las empresas ha aumentado sus precios o prevé hacerlo por el incremento de los costes.
A pesar del actual contexto de incertidumbre económica, los establecimientos de restauración de marca tienen previsto crecer en 2023 en facturación, en su red de locales y en plantilla, según se refleja en el Observatorio 2022 de la Restauración de Marca. En concreto, ocho de cada 10 cadenas confían en incrementar su facturación el próximo año, aunque el ritmo de crecimiento podría ser más moderado que el actual.
La mayoría de los operadores del sector esperan seguir creciendo en 2023, según el informe elaborado por Marcas de Restauración -asociación que representa a más de 150 empresas del sector de la Restauración de Marca-, la empresa de investigación de mercados The NPD Group y la consultora KPMG en España.
A principios de verano, el conjunto de la restauración registraba ya una facturación en niveles previos a la pandemia de la COVID-19, gracias a la recuperación del canal independiente y, especialmente, al avance de la restauración de marca. En el acumulado de enero a agosto elevó sus ventas un 29% respecto a los ocho primeros meses de 2021 y un 21% respecto al mismo periodo de 2019, según datos de NPD.
Además, aunque los españoles prevén reducir su consumo en determinadas actividades, esperan mantener e incluso aumentar la frecuencia de encuentros sociales, como las comidas y cenas con familia o amigos.
Por otro lado, la restauración, al igual que otros sectores, está inmersa en una transición sostenible y saludable. En el apartado de sostenibilidad, el consumidor español reclama, entre otras, medidas la reducción del desperdicio de alimentos (42%) y la no utilización de envases de plástico (38%).
El 27% de los operadores dará prioridad a la gestión y reducción del desperdicio alimentario, un reto que tendrá que afrontar todo el sector ante la previsible entrada en vigor en 2023 de la Ley de Prevención de las Pérdidas y el Desperdicio Alimentario, aprobada en el Consejo de Ministros del pasado 7 de junio.
Riesgos en el horizonte
Para los principales operadores del sector, la amenaza más importante para sus negocios en los próximos meses será la pérdida de capacidad adquisitiva del consumidor (97%).
Otros desafíos son el encarecimiento de la energía (72%), la disponibilidad y/o encarecimiento de materias primas e ingredientes (69%) y la regulación laboral (34%), según los datos recogidos por KPMG.
Esta situación está llevando a los operadores a repercutir, en mayor o menor medida, los incrementos de costes al precio de los menús. El 87% de las cadenas ha aumentado sus precios o prevén hacerlo. Asimismo, están adoptando diferentes acciones para amortiguar la inflación. En esta línea, 70% de los operadores ha renegociado o planean renegociar contratos y el 60% han acometido o acometerá cambios en proveedores.
“Los datos obtenidos consolidan la tendencia de crecimiento en cuota de mercado que la industria del foodservice comenzó años atrás en España y que, con el paréntesis de los dos años de pandemia, vuelve a retomar con fuerza. Lo importante en este momento es gestionar de manera inteligente el contexto económico adverso y proteger tanto a los consumidores como a nuestras propias empresas”, afirma Carlos Pérez Tenorio, presidente de Marcas de Restauración.