¿Tienen futuro los hoteles independientes?
Hosteltur. ¿Son viables los hoteles independientes o están abocados a un proceso de concentración? Esta fue la cuestión más controvertida que expusieron los participantes en el panel 3 del Foro Hosteltur 2022 que se celebró este miércoles en el Teatro Goya de Madrid. El CEO EMEA de Barceló Hotel Group, Raúl González, el presidente para Europa de Apple Leisure Group, Javier Águila, y el CEO de HIP (Hotel Investment Partners), Alejandro Hernández-Puértolas, coincidieron en que la supervivencia de los hoteles a largo plazo es complicada en un entorno en el que cada vez se exige más inversión en tecnología para poder competir. Los tres participantes rebatieron así los argumentos de la directora corporativa de Grupo Hotusa, Marina López Sanjurjo, que en un panel anterior defendió la viabilidad de los hoteles pequeños. El moderador de la mesa, el socio responsable de Consultoría Tecnológica de EY España, Xavier Trías, también se sumó al debate y rompió una lanza a favor de las pymes hoteleras que se asocian a proveedores tecnológicos.
González mostró abiertamente sus discrepancias con la idea de que “los hoteles individuales tienen recorrido”. En su opinión, el mercado hotelero español vive actualmente un proceso de concentración, aunque reconoció que se trata de un fenómeno “lentísimo”.
Recordó que hace diez años los hoteles de Barceló no llegaban al 1% de la cuota de mercado en España y en la actualidad representan el 2,3%. “Es lentísimo, pero el mercado se va consolidando”, recalcó.
“Salvo el que tenga un producto muy singular, un producto que por sí mismo se venda, para el resto va a ser muy difícil competir en un mercado en el que el distribuidor está cada vez más concentrado, en el que se requiere cada vez más tecnología, por mucho que se diga que esta es más asequible, donde todo va a ser más sofisticado y las marcas van a ganar fuerza”, argumentó.
Asume que poco se asentará en España el modelo norteamericano de ‘asset light’ y de hoteles franquiciados, dado que la fórmula tradicional del propietario y gestor de un hotel “se ha roto hace unos años” y está convencido de que cada vez se irá a un mercado donde habrá especialistas en la propiedad y especialistas en la gestión.
Alejandro Hernández-Puértolas defendió la misma idea y replicó también a Marina López porque “la realidad es que esto (el mercado) se está sofisticando cada vez más y requiere de mucha inversión, mucha tecnología y mucho conocimiento”.
Sí que admite que algunos hoteles, con un producto asociado a un “nicho determinado”, pueden ser viables, pero advirtió que “la tarifa es muy importante” en un mercado tan competitivo como el actual.
Explicó que “tener una buena tarifa requiere de muchas cosas, capacidad de compra, capacidad de entender el producto que tienes y eso no es sencillo desde mi punto de vista”.
Añadió que “las agrandes cadenas con toda la capacidad que tienen para invertir en tecnología turística y técnica tienen una ventaja competitiva frente a un pequeño, que lo que tiene que hacer es buscar maneras diferentes de posicionarse y de diferenciarse” para tener viabilidad.
Javier Águila coincidió en que el proceso de concentración en el mercado hotelero es “imparable”, sobre todo porque la “fragmentación” que hay el mercado hotelero español está asociada a empresas familiares en las que la “sucesión” a las próximas generaciones entiende que suele ser muy complicada.
Recordó que cuando comenzó a operar Alua Hotels, en 2015, y antes de la llegada al mercado hotelero español de HIP Partners, el 85% del mercado lo representaban propietarios con menos de tres hoteles y hoy en día HIP Partners es el mayor propietario de hoteles con 80 activos en España. Por ello está convencido de que este proceso de concentración “se va a acelerar”.
Solo el moderador de la mesa, Xavier Trías, quiso “romper una lanza” en defensa de los pequeños hoteles. “Es indiscutible la concentración, pero por otro lado vemos un espacio para ese hotel independiente que cuente con empresas que le provean de esa parte tecnológica que le permita competir”, opinó.
Optimismo a corto plazo
Con respecto a las previsiones del negocio hotelero para este año, los tres participantes coincidieron en que son positivas. “Pinta bien”, resumió Hernández-Puértolas.
Destacaron sobre todo la recuperación de los hoteles vacacionales, mientras que el cliente corporativo y el de MICE también mejora sus cifras, pero más lentamente.
Sí que lamentaron que el mercado asiático, por las restricciones que aún se mantienen por la COVID-19, seguirá cerrado durante prácticamente todo el año, según auguró Raúl González.
En el caso del mercado de inversión en hoteles, Hernández-Puértolas recordó que el negocio ya se recuperó el año pasado, cuando se invirtieron en España en activos hoteleros unos 3.100 millones de euros y este año el apetito inversor sigue siendo “gigantesco”.
Todo ello a pesar de que el coste de la renovación de los hoteles es ahora mucho más caro que el año pasado por el incremento de los precios de las materias primas. “Cuesta más dinero invertir en la transformación de activos y los inversores tenemos que hacer un esfuerzo adicional”, dijo. Algo que tiene un importante coste para HIP, que en los tres próximos meses prevé renovar unos 12 hoteles.
Escasez de mano de obra
Otro problema que se puso sobre la mesa fue la falta de trabajadores cualificados en el sector hotelero. Javier Águila admitió que en su grupo han sufrido la huida de profesionales, en mayor medida cuando se ha ido superando la pandemia.
Raúl González también reconoció que en el sector turístico en la actualidad “hay un problema serio de mano de obra”, que en parte achaca a la pandemia porque muchos profesionales se han ido a otros sectores y ahora no quieren retornar.
Sostenibles y rentables
Por último, se abordó uno de los mayores retos a los que se enfrenta el sector turístico, el de desarrollar su actividad con el menor impacto en el medio ambiente.
Sobre este punto, Alejandro Hernández-Puértolas declaró que, “más allá del componente romántico” que tiene la defensa del medio ambiente, insistió en que “invertir en sostenibilidad es rentable”, en especial cuando se destina a dotarse de energías renovables o a mejorar el rendimiento energético. Solo este año, HIP Partners ha invertido 30 millones de euros en la eficiencia energética de sus hoteles, convencidos de que es una inversión con un retorno (ROI) para el grupo, dado que produce un ahorro para el hotel en la factura energética.
Por su parte, Raúl González está convencido de que “no invertir en sostenibilidad te va a sacar del mercado” porque “va a convertirse en una obligación” para las empresas.
Cree que el sector turístico español, con las ayudas de los fondos europeos Next Generation, podría convertirse en “un ejemplo mundial en sostenibilidad” y “sería una pena que perdamos esa oportunidad”.
En materia de sostenibilidad, Javier Águila señaló el compromiso de Apple Leisure Group de reducir antes de 2030 un 28% sus emisiones contaminantes y recurrir a proveedores locales para recortar su huella de carbono.
Defendió que “la sostenibilidad es un camino porque siempre puedes mejorar y ponerte un objetivo mayor” con nuevas medidas que cumplir.