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El incremento del 4,6% también es algo menor al 6,2% del 2021, muy influenciado al compararse con el 2020, cuando los salarios cayeron por la irrupción de la pandemia.

El salario medio escaló en el 2022 a 25.353,22 euros brutos, el 4,6% más que en el 2021, según los datos de la encuesta anual de coste laboral del INE publicada hoy. La cifra no sirve para batir a la inflación del ejercicio, que tuvo una media anual del 8,4%. Así, los trabajadores perdieron casi cuatro puntos de poder adquisitivo, incluso entre los que más cobran o las autonomías más ricas.

Es una caída de la capacidad de compra que no tiene comparación en la serie. Solo en el 2012 se sobrepasa un descenso del 3% en el poder adquisitivo, ya que la inflación fue del 2,4% y los salarios bajaron un 0,6%.

El golpe de la subida de los precios de la energía, los alimentos, el transporte y la vida en general hizo un agujero en el presupuesto de los españoles y dejó un 2022 para el olvido. Los salarios no lo compensaron. Desde instancias europeas como el Banco Central Europeo (BCE) o en círculos de las patronales se había pedido ir con precaución con el incremento salarial para evitar efectos de segunda ronda que cronificaran la inflación. Entre la contención y la necesidad de recuperar márgenes, han salido perdiendo.

El análisis por sectores deja brechas. Mientras que en la construcción los salarios aumentaron un 5,2%, hasta los 24.415,59 euros, en la industria lo hicieron menos, el 4%, a 29.075,93 euros. Sus trabajadores tienen en todo caso el sueldo medio más elevado, ya que en servicios aumentaron el 4,7% a 24.781,96 euros.

Yendo al detalle, los mejores salarios se dieron en el área de suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, con 63.074,26 euros (+0,2% sobre el 2021); y en el de actividades financieras y de seguros, con 50.391,70 euros (+3%). Ambos repiten en el mismo lugar que el año pasado.

En el lado contrario, los salarios más bajos se dan en hostelería, con 15.175,70 euros (+29%), por los 17.336,67 euros (+2,8%) en las actividades administrativas y servicios auxiliares. En el primer caso el salto es sustancial, guiado por el propio incremento del salario mínimo a los 1.000 euros en el 2022, que afecta de lleno al sector hostelero, y la necesidad de atraer talento con mejores condiciones.

Los madrileños tienen los mejores salarios

Por autonomías no se dan sorpresas. Los salarios más altos están en Madrid, con 30.348,34 euros (+3,5%), en País Vasco, con 29.050,48 euros (+2,9%) y en Catalunya, con 27.420,94 (+5,5%). Los motores económicos del país pagan mejor… pero tampoco cubren la subida de precios. El sueldo más bajo lo reciben los extremeños, con 20.380,34 euros (+4,9%).

Para dar con el lugar donde más crecieron hay que viajar a Canarias, con un 11,2%. Pese a ello su media es la segunda más bajo, con 21.137,05 euros. Escapa al menos del último puesto que ocupaba el año pasado y es el único que puede decir que supera la inflación nacional. Baleares (+8,3%, 23.801,06 euros) y Cantabria (+5,6%, 23.548,93 euros) completan el puesto de incrementos.

Si bien ninguna autonomía ve caer sus cantidades, el menor avance lo tienen los murcianos, cuyo salario medio se incrementa un 1,8%, hasta los 22.177,76 euros.

El salario no es lo único que afrontan las empresas. La estadística recoge que cada trabajador le costó una media de 34.058,33 euros a las compañías, el 4,1% más. La cifra incluye el propio sueldo que recibe el empleado (el 74% del coste), cotizaciones (8.055,63 euros), las indemnizaciones por despidos (144,33 euros) o los gastos en formación (68,32 euros), entre otros. De media las empresas recibieron 227,22 euros en subvenciones y deducciones para fomentar el empleo y la formación.