Los retos que afronta la recuperación turística en el nuevo entorno
Hosteltur. La inflación, la guerra en Ucrania o la transición energética imponen nuevos desafíos. “Un país solo prospera de verdad si prospera el tejido productivo y, por tanto, prosperan las empresas”, indicó ayer Josep Piqué, exministro y experto en geopolítica, que participó en el Foro Hosteltur 2022, celebrado en Madrid. Un objetivo que, en su opinión, tienen que tener muy claro las políticas públicas, que “deben orientarse en la buena dirección”, agregó. “Eso significa políticas fiscales y tributarias, pero también significa políticas presupuestarias que propicien la confianza de los mercados exteriores”, añadió Piqué, que mantuvo una charla con el presidente de Deloitte España, Fernando Ruiz.
Políticas públicas que también han de resolver “el alto nivel de burocracia y el peso administrativo” que se requiere en muchos procesos y que suponen que determinados soportes tarden mucho en llegar al tejido empresarial. En este sentido, Josep Piqué dijo que “el proceso de adjudicación de los fondos europeos es muy mejorable”.
Recordó que pronto se va a retirar la compra de la deuda pública por parte del Banco Central Europeo y “si queremos seguir financiándonos, tenemos que inspirar confianza y solo se consigue con una política de consolidación presupuestaria que permite que los demás confíen en que vas a devolver el dinero que te prestan. También es importante la seguridad jurídica”.
Respecto al mercado laboral, el exministro indicó que “se han minimizado los daños, pero nuestro mercado de trabajo sigue sin funcionar. Sigue existiendo una clara inadaptación entre la oferta y la demanda. Eso afecta, particularmente, a un sector [el turismo] que necesita de flexibilidad y de una formación adecuada de los trabajadores para que estén a la altura de la demanda de servicios turísticos que nos vienen de fuera y que, si no acometemos de manera eficiente y correcta, buscarán alguna alternativa”.
El presidente de Deloitte España se refirió a la necesidad de invertir bien los fondos europeos, para ayudar a la pymes y a su digitalización con el fin de dar “un salto en el tamaño de las empresas”. A su juicio, “España va a seguir siendo una potencia turística”, pero en otros aspectos, como pudiera ser la capacidad de ser líder en sostenibilidad, “depende de si aprovechamos las oportunidades del futuro, aunque hay mucha incertidumbre. La recuperación de la cadena de suministros es una oportunidad increíble para España, pero hay que estar ahí, hay que usar bien los fondos europeos para hacer eso”.
Transición energética
Otro reto es la transición energética, que “es inevitable porque la propia demanda va a exigir nuevos servicios que sean acordes con la necesidad de reducir los gases de efecto invernadero, de mejorar el aire, de mejorar el clima”, señaló el exministro de Industria.
En este sentido, considera que sector turístico “lo tiene que controlar para sus funciones de producción. Y aunque lo está haciendo, siempre se puede hacer más en digitalizar los procesos y el contenido de los servicios que ofrece y desde luego proceder a una adaptación medioambiental que se puede acabar convirtiendo, y es bueno que así sea, en un argumento de venta”, agregó.
Respecto al encarecimiento de los precios de la energía, como consecuencia de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, el presidente de Deloitte piensa que, ni a corto ni a medio plazo, los precios de la energía volverán a los niveles previos al inicio del conflicto.
“Nos enfrentamos a un periodo con precios de la energía más altos de los que teníamos antes de iniciarse el conflicto y eso nos va a forzar a tomar medidas”, apuntó Ruiz.
Esta situación ha impactado en los precios, circunstancia que se suma al alto coste que supone sustituir las fuentes de generación de energía para luchar contra el cambio climático, “un coste que no se ha explicado bien a la sociedad”, indicó. Por tanto, nos adentramos en “una época con precios de energía más elevados de los que teníamos”.
En este contexto, aunque reconoció que las perspectivas para el turismo son muy buenas, no se puede obviar el incremento de costes, lo que puede llevar a anticipar decisiones que todavía estaban en consideración. “Por ejemplo, dotar a todas las infraestructuras turísticas de paneles y de sistemas de generación de energía, que permitan reducir el consumo y abaratar los costes. Eso nos va a afectar a toda la sociedad y vamos a tener que actuar en consecuencia”, manifestó.
Cómo deben ser los nuevos líderes
“Una característica fundamental de los últimos tiempos es la velocidad”, indicó Fernando Ruiz, pero “también es cierto que el cambio tan rápido proporciona oportunidades mucho más atractivas y mucho más importantes”, añadió.
De este modo, cree que un elemento relevante para ser un buen gestor “es la capacidad de anticipación y la intuición. Hoy hay que moverse muy deprisa si no quieres perder el tren, pero si lo coges, los trenes son mucho más grandes que los anteriores”, agregó.
“Desde el punto de vista de la actitud empresarial, coincido en la agilidad, rapidez y capacidad de adaptación a las circunstancias”, señaló Josep Piqué.
Por otro lado, destacó que la pandemia ha acelerado la digitalización y la transición energética y, quien “no se digitalice desaparecerá porque el mercado se encargará de eso”, aseveró. De este modo, considera conveniente “impregnar toda la organización de arriba abajo, empezando por el CEO y terminando por el último trabajador, de la digitalización y la adaptación a las exigencias de la transición energética”.
Y en el caso de España, “insistir en algo que hemos ido haciendo bien, pero que sigue siendo el camino, que es la internacionalización para diversificar nuestra oferta, y la desestacionalización en la prestación de nuestros servicios, que nos permita tener una cierta estabilidad y una cierta recurrencia que siempre da mayor seguridad en los comportamientos”, declaró el exministro.
Impacto de una posible subida de los tipos de interés
“Si hablamos de incrementos de uno o dos puntos, no creo que tenga un impacto relevante en el consumo ni en la inversión. Tiene más impacto la inflación en el consumo”, expuso Fernando Ruiz. Insistió en que si se produce una subida de los tipos de interés en los términos en que se está planteando, no tendrá una gran incidencia.
“En estos momentos el dólar está muy fuerte, no solo respecto al euro, también respecto al resto de monedas y, por lo tanto, aquellos emisores que se manejan en dólares tienen mayor capacidad de compra si quieren acceder a servicios de países que nos manejamos con otra moneda, en particular el euro”, afirmó Piqué.
Si el Banco Central Europeo sigue la senda de la Reserva Federal de Estados Unidos, lo que puede pasar es que la devaluación del euro y de las otras monedas respecto al dólar se amortigüe porque estamos hablando de acompasar la política monetaria. De momento no ha sido así.”
Mientras tanto, “aprovechemos la oportunidad, y fijemos nuestra atención en aquellos países que se manejan en dólares porque ahí están ganando claramente competitividad”, añadió.