Los hoteleros europeos urgen a frenar los altos precios de la energía
Hosteltur. Hotrec advierte que el encarecimiento amenaza al sector con quiebras
Actuaciones para conseguir unos precios de la energía asequibles que permitan al sector sobrevivir este invierno. Esta es la petición urgente que hace la asociación europea de hoteleros HOTREC a los líderes de la Unión Europea para salvar de la quiebra a miles de negocios de hostelería en toda Europa.
Los hoteleros europeos recuerdan que ya vienen de afrontar una serie de desafíos en los últimos meses, como la escasez de trabajadores y una espiral inflacionista que ha disparado también los precios de los alimentos. Todo ello, además, en plena recuperación tras calvario de la COVID-19.
“Las empresas del sector han registrado un incremento en el precio del consumo de energía de entre 200% y el 600%”, denuncian en una carta a los ministros de Energía comunitarios
En este sentido, alertan de que ya se suceden las quiebras de muchas empresas, mientras que otras están analizando cuidadosamente su modelo de negocio para analizar si pueden permanecer abiertos o si deben cerrar. “Nuestro sector depende en gran medida de la energía (por ejemplo, calefacción y refrigeración) para brindar a los huéspedes el servicio que esperan”, constatan.
“Los precios de la energía deben reducirse y las empresas deben tener garantizado el acceso a la energía para sobrevivir”, abunda Hotrec.
“Seguimos instando a las empresas a ser eficientes energéticamente, a ahorrar tanta energía como sea posible y a seguir la transición a las energías renovables. Pero hay que tener en cuenta que las empresas necesitan precios asequibles de energía y alimentos para operar”, aseveran
Paralelamente, a la hora de regular los hoteleros, el sector piden al Consejo que tenga en cuenta que 2020 y 2021 no deben incluirse en el periodo de referencia del Reglamento, al menos en el caso del sector de la hostelería, “ya que la mayoría de las empresas del sector estuvieron completamente cerradas durante mucho tiempo”. Por contra, piden que el periodo de referencia cubrala media de los tres años de mayor consumo en los últimos cinco años.