La batalla BBVA-Sabadell se recrudece por las pymes y los accionistas
La Vanguardia. Las dos entidades suben el tono mientras sigue la incertidumbre sobre los plazos
La batalla por la opa del BBVA sobre el Sabadell se ha recrudecido esta semana después del parón veraniego. La contundente postura del consejero delegado del Banc Sabadell, César González-Bueno, el lunes en un coloquio con el número uno del BBVA en España sorprendió por su dureza. Lo mismo que el ataque que sufrió el presidente Carlos Torres en un acto semiacadémico en Esade por parte de dos descendientes de los fundadores del Sabadell. Su respuesta fue alertar que las acciones sufrirán si fracasa la opa.
Fue también la semana en la que la presidenta de la CNMC, Cani Fernández, explicó que es precisamente el carácter hostil de la operación lo que incrementa de manera exponencial los plazos para decidir si la compra atenta contra la competencia o no. Muestra de ello es la disparidad de datos sobre el impacto que la compra puede tener en el segmento de las pymes, que se ha convertido en uno de los principales caballos de batalla de los contendientes.
El porcentaje de accionistas coincidentes en ambos casos puede rondar el 20%
Fuentes del sector explican que si se toma la definición del Banco de España de pymes (empresas con un volumen de negocios anual de hasta 50 millones de euros), hay más de 600.000, de las que el BBVA trabaja con el 28% y el Sabadell con el 25%. Las pymes que operan con BBVA, Sabadell y alguna otra entidad son un 7% del total. Las que lo hacen exclusivamente con los dos bancos en liza representan el 1,5% de las pymes españolas. En el caso de Catalunya, los porcentajes son superiores. Un 14% trabaja con las dos entidades y otras mientras que las que lo hacen exclusivamente con BBVA y Sabadell se elevan al 3,6%.
Otras fuentes estiman que para realizar un análisis más preciso se deberían descartar las microempresas (las que factura menos de dos millones). En ese caso, el porcentaje de pymes con una facturación de entre 2 y 100 millones y que operan con los dos bancos son el 24% en España y el 41% en Catalunya.
La batalla por analizar los efectos de la opa sobre la competencia se prevé larga, como ha insinuado esta semana Cani Fernández. Mientras los analistas más optimistas ven una solución en enero, los más pesimistas creen que no será hasta bien entrado el año próximo.
A partir de ahí se dará la batalla definitiva con la oferta pública. Aunque es una incógnita saber qué parte de los accionistas del BBVA lo son también del Sabadell, fuentes consultadas señalan que podría rondar el 20%. Dado el elevado porcentaje de voto favorable que el BBVA consiguió en la Junta de ampliación de capital para ejecutar la opa, es muy probable que los accionistas del BBVA que tengan títulos del Sabadell den el sí a la operación. Por lo tanto, el éxito de la opa estará en manos de los minoritarios y de los llamados fondos de arbitraje que son los que toman posiciones en los bancos opados para capturar la prima de la compra. Es también una incógnita saber el peso que tienen si bien antes de que se iniciara la guerra, los minoritarios controlaban más del 40% de los títulos.
Precisamente esta semana ha surgida una asociación de accionistas minoritarios que quiere defender sus intereses en el Sabadell frente a la opa. La asociación con sede en el gremio de fabricantes de Sabadell quiere hacer frente a la compra del BBVA, que consideran desfavorable para ellos y para la entidad. La asociación está presidida por el abogado y presidente de la Fundación por la Industria, Jordi Casas.
Mientras en el resto de puntos desencuentro, los dos bancos mantienen sus posiciones. El Sabadell insiste en que las sinergias calculadas por el BBVA derivadas de la integración no son ciertas mientras que el banco que preside Carlos Torres defiende sus cálculos de 850 millones. El BBVA tampoco quiere entrar en la guerra de dividendos que ha puesto sobre la mesa el Sabadell al ofrecer 2.900 millones de euros. Según el BBVA la operación incrementará el beneficio por acción del Sabadell en cerca de un 30%. La guerra sigue.