Ocho recomendaciones de KPMG a las empresas para afrontar el año
Hosteltur. “2021 será el año de las decisiones. Y el momento es ahora”. Desde KPMG despiden “un año duro y complejo”, pero “es momento de reflexionar, analizar y extraer aprendizajes” para “lanzar un mensaje hoy a la empresa del futuro. Porque si algo nos ha enseñado este año es a prepararnos para todo”. Y ese prepararse para todo lo concretan en ocho recomendaciones.
1.- No perder de vista lo importante, las personas
La gestión de personas, “centro indiscutible de 2020, el verdadero motor de la economía y de las empresas, ha estado, y estará, en el foco de la toma de decisiones”. Para 2021, como inciden desde la consultora, “la clave estará en escuchar. El diálogo será imprescindible en la negociación colectiva que asentará unas nuevas relaciones laborales. El liderazgo deberá ser más receptivo y humano, capaz de entender y valorar la diversidad. Y será imprescindible conocer y atender las necesidades del nuevo consumidor, ya que tras este año ninguno somos los mismos”.
2.- Buscar eficiencias hoy y competir mañana
Pocos años tantas compañías han tenido que afrontar un reto de la magnitud de 2020, según reconocen desde KPMG: “Una vez superado el principal escollo -garantizar y optimizar la liquidez-, toca centrarse en la anticipación y, por supuesto, la generación de valor para hacer cumplir los planes de negocio”.
El nuevo año, añaden las mismas fuentes, “puede traer numerosas oportunidades si se toman las decisiones adecuadas, abordando todas las áreas de la compañía, desde la cadena de suministro al área de ventas. Sin dejar de lado el papel del private equity en la recuperación, dada su capacidad de realizar inversiones con el objetivo de reestructurar las compañías. 2021 será el año de las decisiones. Y el momento es ahora”.
3.- Priorizar la digitalización: no hay vuelta atrás
Sin duda, como confirman desde KPMG, “2020 ha supuesto un punto de inflexión para los directores de Sistemas de Información, que han pasado a tener un papel fundamental y una función transversal dentro de las compañías”.
La digitalización, por tanto, “ya no es una opción: es una de las caras (más) visibles de la compañía. La experiencia de clientes y consumidores en medios digitales debe ser única, personalizada, pero sobre todo integrada y sencilla. La inteligencia artificial continuará abriéndose camino, y la computación cuántica marcará un punto de inflexión en la tecnología. 2021 será el año en el que terminaremos de asumir nuevas formas de consumir, de trabajar y relacionarnos. Porque estamos ante una nueva era.
4.- Sólo tenemos un planeta (y los inversores lo saben)
En 2021, según subrayan las mismas fuentes, “tocará repensar muchos de los planes de futuro, pero sin duda seguirá siendo verde. Gobiernos, inversores, sociedad y los propios empleados reclaman que toda estrategia tenga la mirada puesta en un futuro verde, descarbonizado y consciente de los límites de la producción lineal. Conceptos ya conocidos como finanzas sostenibles y economía circular pasarán a formar parte indiscutible de la agenda, al igual que los riesgos asociados al cambio climático. Y los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobierno corporativo, por sus siglas en inglés) se analizarán (más) minuciosamente por los inversores en su toma de decisiones”.
5.- Europa tiene un plan de futuro: ser parte de él
De los 750.000 millones de euros del programa Next Generation EU, a España le corresponden 140.000 millones, 72.000 millones en transferencias directas y el resto en préstamos, según publicó HOSTELTUR noticias de turismo en España obtendrá en ayudas directas 72.700 millones de euros del fondo europeo de rescate. Con estos fondos podrá financiar proyectos que contribuyan a incrementar la resiliencia de su economía.
La relevancia de esta financiación para el futuro de las compañías españolas es clara, según KPMG, ya que “el 45% ya ha mostrado su interés en participar en los fondos europeos. Pese a que poco a poco se va conociendo la legislación comunitaria y nacional que articulará su gestión, las empresas ya pueden ir preparando el camino para acceder a estos recursos”.
6.- Prepararse para lo inesperado: sí, es posible
El coronavirus ha dado un vuelco a los mapas de riesgos. Sin embargo, como indican desde la consultora, “disponer de hojas de ruta continúa siendo clave para garantizar la continuidad del negocio. Eso sí, ante el nuevo entorno la clave es la flexibilidad”.
Por ello “de cara a 2021 la identificación y anticipación de los posibles riesgos será fundamental. Atendiendo a las lecciones aprendidas en un año especialmente complejo, los expertos recomiendan adoptar un enfoque integral en base a múltiples escenarios que cubra áreas clave como la gestión de riesgo de fraude y que cuente con las herramientas y tecnologías adecuadas”.
“Tampoco se pueden descuidar aspectos como la ciberseguridad, como consecuencia del impulso de la digitalización; la continuidad de las cadenas de suministro o el cumplimiento normativo y la auditoría interna. Con el enfoque adecuado sentirse protegido es posible”.
7.- Seguir de cerca las novedades legales y fiscales
El pasado año, según apuntan desde KPMG, “ha demostrado la importancia de conocer la regulación y su impacto para mitigar posibles riesgos, pero también para detectar oportunidades. De cara a 2021 las empresas deberán continuar prestando especial atención a la aparición de nuevas normativas y al cumplimiento de las ya conocidas como el Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales (IDSD) o la DAC6. También será importante trazar una hoja de ruta en base a las novedades fiscales, ya que los Presupuestos Generales del Estado recogen figuras tributarias relevantes para las compañías”.
8.- La confianza empieza por la transparencia
La comunicación y la transparencia en las cuentas anuales, aseguran desde la consultora, “serán imprescindibles para conocer la situación de las compañías en un año históricamente complejo. Disponer de información relevante, fiable, comparable y útil otorgará la confianza que necesitan los grupos de interés en su toma de decisiones. De cara a 2021 otro de los protagonistas será la reforma de los IBOR (tipos de interés de oferta en el mercado interbancario, por sus siglas en inglés). Nuevos retos para un entorno que continúa siendo atípico”.